El Templo de San Juan de Dios un símbolo de la historia y la cultura local a pesar de las dificultades

El Templo de San Juan de Dios, situado Parral, es un lugar con una larga historia y un importante patrimonio cultural. Este templo fue fundado en 1682 como un hospital para enfermos y lesionados de las minas, y desde entonces ha sido un importante centro de atención médica y espiritual para la comunidad local.

Una de las características más destacadas del Templo de San Juan de Dios es la veneración de la imagen de Nuestra Señora María de la Soledad, considerada como la patrona de Chihuahua y Reina de los mineros. La imagen fue traída desde España por Fray Bartolomé de Quezada en 1687, y desde entonces ha sido objeto de gran devoción por parte de la comunidad.

A lo largo de los años, el Templo de San Juan de Dios ha sido objeto de numerosas reformas y mejoras, incluyendo la construcción de un retablo de madera acabado en hoja de oro. Este retablo es una de las joyas del templo, y presenta una pintura de la piedad en la parte superior, y a San Pedro y San Pablo a los lados. También se pueden encontrar imágenes de San Juan de Dios y San Pedro de Alcántara, cuyo tema principal es el dolor por enfermedades.

A pesar de su importancia histórica y cultural, el Templo de San Juan de Dios ha sufrido varias dificultades a lo largo de los años. En 1864, durante la presidencia de Benito Juárez, el templo y el hospital fueron incautados y convertidos en cuarteles militares. Los enfermos y los frailes fueron arrojados a la calle, y el patrimonio del templo fue gravemente dañado.

A pesar de estos desafíos, el Templo de San Juan de Dios sigue siendo un importante centro de culto y un símbolo de la historia y la cultura de Chihuahua. La imagen de Nuestra Señora María de la Soledad sigue siendo objeto de gran devoción, y el templo sigue siendo un lugar donde la comunidad puede reunirse para orar y reflexionar sobre su fe y su historia.