Técnico laboratorista acusa a Secretaría de Salud de liberar una base federal a su costa
—-Despidieron injustificadamente a Juan Carlos Loera Mendez sin darle oportunidad para defenderse debidamente
Juan Carlos Loera Méndez, un Químico que se desempeñaba como técnico laboratorista del Banco de Sangre del Hospital General de Parral, ha presentado una demanda contra la Secretaría de Salud, alegando que fue despedido injustamente en un intento por liberar una base federal. De acuerdo a la versión del entrevistado, el despido se produjo después de que se le acusara de omisión y retraso de sus funciones en relación con una solicitud de transfusión de sangre.
Según Loera, el incidente en cuestión tuvo lugar el 22 de agosto de 2022, cuando una trabajadora social llegó al Banco de Sangre para acompañar a una paciente que requería un hemocomponente. Sin embargo, Loera se dio cuenta de que la solicitud estaba incompleta y mal elaborada, carecía de información vital, como el grupo y tipo de sangre de la paciente, lo cual es una norma dentro del banco de sangre, todo de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana NOM-253-SSA-2012.
En este sentido Loera se acercó a la familia de la paciente y les explicó que necesitaba que todos los campos estuvieran llenos en la solicitud. Posteriormente, regresó con una solicitud alterada y de carácter urgente, cuando al principio era ordinaria, pero como no estaba facultado para utilizar hemocomponentes, trató de ponerse en contacto con su jefe para obtener autorización. Sin embargo, no pudo contactar con su jefe y tampoco recibió respuesta del médico responsable de la paciente.
La situación se pone en tela de duda, cuando la enfermera informó, que el paciente necesitaba el hemocomponente desde las 11:30 a.m. del mismo día. Sin embargo, Loera no había comenzado su turno hasta la 1:00 p.m. y no se le había notificado de la situación hasta las 2:15 p.m. de ese mismo día. Loera se preguntó por qué se les había notificado tan tarde si la situación había sido urgente desde la mañana. Se preguntó por qué se había esperado hasta que él llegara para manejar la situación, si había otros técnicos que podrían haber atendido la emergencia antes.
Loera fue obligado por el titular de recursos humanos que en aquel entonces era el licenciado Erik Gilberto Sierra Nava a firmar un acta administrativa y posteriormente fue despedido formalmente en una reunión en la que se le acusó de haber cometido un error.
El entrevistado alega que su despido fue injustificado y que la Secretaría de Salud quería liberar su base federal para colocar a uno de sus incondicionales en su lugar. Loera se ha mostrado consternado por la pérdida de su trabajo en donde tenía ya 8 años de labores y ha demandado a la Secretaría de Salud para ser reinstalado en su puesto.
Este caso ha puesto de manifiesto las prácticas cuestionables en la Secretaría de Salud y ha generado un gran interés. La comunidad médica ha expresado su solidaridad con Loera y ha pedido una revisión de las políticas de empleo en la Secretaría de Salud para garantizar que se tomen decisiones justas y equitativas en relación con la contratación y el despido de personal.