Veneno para las Hadas – Reseña

Ciclo de cine Hasta Parral tiene Miedo

Por Saralyn Quiroga

Por Saralyn Quiroga

“Veneno para las Hadas” es una cinta de terror mexicana de 1986, dirigida por Carlos Enrique Taboada, popular además por otras cintas de terror como: “Hasta el viento tiene miedo”, “Mas negro que la noche” y “El libro de piedra”.

En “Veneno para las hadas” conocemos a dos niñas, llamadas Verónica (Ana Patricia Rojo) y Flavia (Elsa Maria Gutierrez), las cuales se vuelven amigas en la escuela, a lo largo de la película vemos como una incipiente amistad normal, inmediatamente va cambiando cuando Flavia se da cuenta de que su amiga está bastante interesada en el asunto de las brujas. Verónica le revela a su amiga que ella es una bruja y no una niña como todos creen.

Esta información es bien interesante, pues, la cinta misma empieza con una escena donde vemos una cara juvenil en la oscuridad y esta va cambiando progresivamente hasta transformarse en una cara vieja y desagradable, como de una bruja.

Entonces, una vez que conocemos a Verónica una niña que dice ser una bruja, nos deja pensando en dos posibilidades: la primera, es que esta sea una niña curiosa por temas poco convencionales para su edad y está inventando historias, o la segunda alternativa, que realmente sea una bruja.

La película juega con estas dos opciones una y otra vez, y no se adelanta para darte las respuestas. Esa es una de las tantas cosas que me ha gustado de Veneno para las hadas, consigue mantenerte intrigado.

Ver “Veneno para las Hadas” significa equilibrar la mirada entre la fantasía y la realidad, dentro del juego del autor, hay dos posibilidades, la mirada infantil, o bien la adulta, fría y objetiva, independientemente de la perspectiva, la envidia es uno de los móviles principales dentro de las interacciones de los personajes.

Veronica desea lo que posee su amiga, y al no poder obtenerlo, recurre a sus invenciones de brujería, Flavia atemorizada, cede a las amenazas y manipulaciones de Veronica, la ausencia de los padres permite que la mirada infantil se desborde y que la fantasía fluya.

Un problema bastante típico en la actualidad con las cintas de terror es que no saben darles un cierre. Me ha pasado que he visto varios filmes donde me quedo insatisfecho con el desenlace, entonces ver una cinta como Veneno para las hadas donde toda su realización es excelente, desde la fotografía hasta sus actuaciones, el desenlace es simplemente excelente, es una sobresaliente película de terror mexicana que destaca tanto por su trama como por la manera en que nos presentan dicha historia si no la han visto, queda más que recomendada para este ciclo de cine que se inaugurar este viernes a las 7:00pm en el Archivo Histórico.