El Templo de Fátima, una joya única en su clase, celebra 69 años de su consagración

Serie: “Por los templos de Parral”

El Templo de Fátima de Parral, un monumento único en su clase, celebra su 69 aniversario desde que fue consagrado por el Obispo Don Antonio Guisar Valencia en 1954. El templo fue construido por el Cura Agustín Pelayo Brambilla, quien colocó la primera piedra en la falda poniente del cerro de «La Prieta» el 9 de agosto de 1953.

Lo que hace que este templo sea único en todo el país es que es completamente de piedra y fue diseñado específicamente para los mineros de la región. Sus muros de piedra están revestidos con metales extraídos de las minas locales y cuenta con 210 asientos individuales que representan las mojoneras que delimitan los fundos mineros.

El comulgatorio y los ocho candiles son de madera de encino y las cinco franjas de piedra en el interior del templo representan los diferentes tipos de minerales extraídos de las minas de la región.

El altar es un bloque de piedra rústica, en cumplimiento con el dictado de Dios en éxodo 20, y el templo cuenta con varias imágenes sagradas, incluyendo la Virgen del Rosario, el Señor San José y el Señor de los Guerreros.

El símbolo minero de pico, pala y cachumba está presente en la fachada del templo, junto con dos cruces de encino. Debajo de la escalera se encuentra un salón de juntas y almacenamiento para objetos sagrados.

El Templo de Fátima de Parral es un monumento importante no solo para los mineros de la región, sino también para todos aquellos que valoran la historia y la cultura de la zona. Con su arquitectura única y su historia fascinante, es un tesoro que debe ser apreciado y preservado para las generaciones futuras.